sábado, 28 de enero de 2012

BLANCA NIEVES CUMPLE 75 AÑOS; Y LOS ENANITOS TAMBIÉN


Blanca Nieves cumple 75 años 


Y también los siete enanitos. Y el estereotipo de reina engreída en su diabólica labor de madrastra. Y el espejito, espejito ¿quién es la más guapa…? y la manzana asesina. Y el príncipe enamorado, liberador de hechizos…

Este año de 2012 se cumplen 75 años del primer largometraje animado producido en USA, con la magia de Walt Disney como sello de garantía. La premier cinematográfica mundial tuvo lugar en Hollywood el 21 de diciembre de 1937, concretamente en el Carthay Circle Theater, en un tiempo de sangre y oscuridad para España, con una especie de padrastro, de Franco nombre, que había inoculado entre la población el veneno de la guerra, como la madrastra lo hiciera con la fruta prohibida de la manzana.

España no estaba, pues, para muchos estrenos, ni siquiera para aquella ternura alentada por el amigo Walt, por muy animada que esta fuera. De manera que la cinta no pudo ser estrenada hasta el año 1941, el 6 de octubre, para ser exactos, en el Palacio de la Música de Madrid. Y lo hizo de la mano de Filmófono, distribuidora que se había caracterizado desde su fundación, allá en los inicios de la década anterior, por su apuesta por el cine independiente, principalmente francés y soviético. 

Si algo caracterizaba a Filmófono era su especial habilidad propagandística, no en vano el estudio de publicidad de la compañía había estado dirigido por el gran Enrique Herreros (ver entrada en este mismo blog), con la colaboración gráfica del dibujante y cartelista López Réiz.

Entre los materiales diseñados por el Estudio Filmófono, destacan tres carteles de un inspiradísimo López Réiz –Herreros ya había abandonado la compañía--, además de algún pasquín, varios plumas de prensa  y un par de programas de mano.

En Barcelona, el gordo del estreno recayó en el Cine Kursaal, uno de los salones más distinguidos de la época. La dirección del local no dudó en presumir de la exclusiva al tiempo que lanzaba un aviso: “Teniendo la empresa Kursaal la exclusiva de esta película por tiempo indefinido, no pasará al reestreno hasta el año próximo en Barcelona ni se estrenará a menos de 70 Km. de distancia”.

Disfruten de las imágenes.



BLANCA NIEVES Y LOS SIETE ENANITOS
Snow white and seven dwarfs. USA 1937
Cartel del estreno en 1941- Movie Poster
Diseño: López Réiz




Cartel del estreno en 1941- Movie Poster
Diseño: López Réiz






Cartel del estreno en 1941 - Movie Poster
Diseño: López Réiz






Cartel del estreno en 1941 (pequeño formato)
Diseño: López Réiz






Programa de mano local 
Cine Kursaal de Barcelona





Programa de mano
 Cine Kursaal de Barcelona






Programa de mano tamaño Pasquín
 Cine Kursaal de Barcelona




Programa de mano de la reposición de R K O Radio Films
Circa 1945


lunes, 23 de enero de 2012

USABAL, UN VALENCIANO EN HOLLYWOOD


LUIS FELIPE USABAL

En los años veinte, mucho antes de que el cine aprendiera a hablar, Hollywood desplegó el tarro de las esencias en su desarrollo comercial, en su tarea de encumbrar a los nombres y rostros más carismáticos de la pantalla. Con un objetivo claro: elevarlos a los altares de la fama, convertirlos en ídolos de masas, en mitos y dioses. Nacía así el star system, un firmamento de estrellas cuya luz sigue aun alumbrando senderos (sirva de ejemplo la novísima The Artist)

Directores, productores, gentes de marketing y publicidad, fotógrafos, maquilladores, peluqueros, decoradores…, lo mejor de cada casa aterrizó en Hollywood dispuestos a dar esplendor a ese objetivo.

Entre esas especialidades, hubo una de suma importancia, la de ilustrador, la de pintor de sueños. Gentes de trazo exquisito capaces de convertir cada cinta en algo mágico e irresistible a través de Carteles, Programas, Anuncios y Catálogos de temporada. Los empresarios de salas disponían de infinidad de producciones para confeccionar su temporada. Y apostar por una cinta u otra a dependía la mayor parte de las veces de cómo ésta fuese presentada en los Catálogos, que casi nunca recurrían a la fotografía, por ser ésta excesivamente convencional. Ilustrar, componer, sublimar mediante el pincel era la clave.

Luís Felipe Usabal fue una de las firmas más reconocidas de esos años: un pintor valenciano nacido en 1876, amigo y admirador de Sorolla, que había cursado estudios en la Escuela de Bellas Artes de San Carlos antes de aterrizar en Hollywood. Un artista elegante y plástico, moderno, exquisito con la fisonomía humana, un gran creador de ambientes. Esta personal manera de entender la ilustración le abriría las puertas de la productora Fox, para la que trabajó entre los años 1923 y 1928. A continuación reproducimos algunos de esos trabajos cinematográficos que llevaron su firma: Usabal.

JOY STREET
Catálogo Fox Temporada 1927/1928
Ilustración de Usabal




ENAMORADOS DEL AMOR
Catálogo Fox Temporada 1923/1924
Ilustración de Usabal





EL ÚLTIMO VARÓN SOBRE LA TIERRA
The last man on earth. Usa 1924
Catálogo Fox Temporada 1924/1925
Ilustración de Usabal







NOTICIARIO FOX
Catálogo Fox Temporada 1924/1925
Ilustración de Usabal







EL CABALLO DE HIERRO
The iron horse. USA 1924
Catálogo Fox Temporada 1925/1926
Ilustración de Usabal






TRES HOMBRES MALOS
Three bad men. USA 1926
Catálogo Fox Temporada 1925/1926
Ilustración de Usabal





OLL VELVET
Catálogo Fox Temporada 1927/1928
Ilustración de Usabal




domingo, 15 de enero de 2012

SUEÑOS DE CARTÓN PIEDRA

Terenci Moix y el Péplum



Los últimos días de Terenci fueron de extrema obsesión por todo ese mundo mitómano que le rodeaba. Con noches enteras sentado frente al ordenador a la caza de esa foto ansiada. Así, hasta su adiós definitivo. Tengo grabadas las imágenes en miniatura esparcidas por la pantalla de su ordenador. Ahí estaba Steve Reeves, Gordon Scott y otros guaperas de porte épico. También las paredes de su estudio rendía pleitesía a la Roma Imperial, al hervidero de cintas cimentadas en el cartón piedra, en la túnica y en la musculatura. Era una de las muchas debilidades de Terenci. Y también la mía, aunque por diferentes motivos.

El caso es que hoy deseo recordar algunos de los iconos del peplum más evocados en nuestras cenas regadas con Dry Martini –él regaba mejor y más que yo, tengo que reconocerlo--. Cuando Inés, su querida Inés, me comunicó su muerte, me sumí en un largo tiempo de silencio, sólo importunado por el dolor. Luego escribí lo que sigue a continuación.  



SINUHE EL EGIPCIO
The egyptian. USA 1954
Cartel de Soligó


  
DIME QUE FUE UN SUEÑO

Disfruté de Terenci muchas horas de los últimos años de su vida. Las cenas en el Metropolitan –su restaurante amigo— y las reuniones con sabor a buhardilla --esa buhardilla que era su piso-despacho de la calle Muntaner--, vienen hoy a mi mente, una a una, separadas nítidamente por la magia de su variado contenido retrospectivo. Todo él era un álbum de recuerdos, de memorias, que yo compartía con asombroso mimetismo. Su ferviente militancia nostálgica era la mía. Pero él siempre era el sabio, la luz, aunque le molestaba reconocerlo. Cada charla con Terenci era puro gozo para quien, como yo, como él, disfrutaba recordando la miscelánea popular de nuestros años impúberes. Un día el turno era para los tebeos, con Boro Kay a la cabeza, sin olvidar a otro de sus personajes fetiches como era Tony y Anita, la colección de Maga. Otro, los carteles de cine, cuyo ranking preferencial encabezaba Sinuhe el egipcio, al que seguían Cesar y Cleopatra, La Atlántida, Suez, La túnica sagrada, El ladrón de Bagdad etc., cartel este último de gran tamaño que presidía majestuoso una de las paredes de su casa. Y no sólo le seducía la magia del escenario que el cartel representaba, también volcaba su interés sobre el diseño y disertaba con gran sentido gráfico sobre las escuelas cartelísticas del sector –admiraba a Peris Aragó y se enorgullecía de poseer un original de Jano que éste le había regalado. Como digo, siempre compartiendo nostalgias, disputando mitos, escarbando en la memoria cinéfila de ambos, aunque la mía no era más que un proyecto de alzheimer comparada con la suya, con su sabiduría. Y no sólo el cine de Hollywood era su credo, sino toda la producción de cine clásico en general. Su memoria almacenaba hasta los más ínfimos detalles de cualquier producción. Pero no era ésta una memoria fría --aquélla que se construye hincando codos--, sino la consecuencia de haber bebido el cine desde el alma, desde su enorme corazón.

Nunca vi a nadie con una mirada tan mágica, capaz de expresar al mismo tiempo la pasión y la ternura. Porque Terenci era un ser especial, único, a veces frágil, otras niño, pero siempre bondadoso, de eterna sonrisa, incluso en los momentos más extremos de su enfermedad. Se me encoge el alma sólo de pensar que ya no disfrutará más de sus cromos de King de la India, de Mujercitas y de tantos otros iconos que él veneraba. No puedo hacerme a la idea de no verlo más delante del ordenador mostrándome sus últimos trofeos sacados de la red, casi siempre en forma de fotos de sus actores y actrices preferidos –que eran casi todos. Alguien debería decirles, allá en el cielo, a los Errol Flynn, Marilyn Monroe, Bette Davis o Silvana Mangano, que salgan a recibirlo, que lo quieran mucho, que lo integren en su club de estrellas, ese firmamento de astros que él tanto amó. Y que no se olviden de avisar a su niño, Sal Mineo y a su Apolo particular, Steve Reeves. Pero, por encima de todo, hay que decirles que le devuelvan en forma de homenaje todas las ofrendas que Terenci les dedicó aquí en la tierra. Seguro que, incluso así, seguirán estando en deuda con él. Porque si hubo en el planeta alguien que encumbró a los mitos del cine más allá del mismísimo star system, ese fue nuestro Terenci Moix. No sé ustedes, pero yo tengo la sensación de que a partir de ahora ni Hollywood, ni el cine clásico, ni sus actores volverán a ser los mismos. Así que, Terenci, llámame y dime que fue un sueño. 

4 de abril de 2003


 CLEOPATRA
USA, 1934
Cartel de Martí Marí




SANSÓN Y DALILA
Samson and Delilah. USA 1949
Cartel de José María





QUO VADIS
USA 1951
Carteles de MCP





LA TÚNICA SAGRADA
The robe. USA 1953
Cartel de Soligó





LA REINA DE SABA
La regina di Saba. Italia 1952
Cartel de Soligó




JULIO CESAR
Julius Caesar. USA 1953
Cartel de MCP






DEMETRIUS Y LOS GLADIADORES
Demetrius and the gladiators. USA 1954
Cartel de Soligó







ULISES
Ulisse. Italia 1953
Cartel de Ramón





HÉRCULES
Le fatiche di Ercole. Italia 1958




 LA BATALLA DEL MARATHON
La battaglia di Maratona. Italia 1959
Pluma prensa de Mac





SALOMÓN Y LA REINA DE SABA
Salomon and Sheba. USA 1959
Cartel de Mac





LOS ÚLTIMOS DIAS DE POMPEYA
Samson and Delilah. España, Italia, Alemania 1960
Cartel de Jano





EL COLOSO DE RODAS
España. Italia, Francia 1961
Cartel de Jano






RÓMULO Y REMO
Romolo e Remo. Italia 1961






CLEOPATRA
USA 1963






lunes, 9 de enero de 2012

TARZAN DE LOS MONOS


El personaje creado por Edgard Rice Barrougth es sin duda el prototipo del héroe más aspiracional y ensoñador de cuantos creara la literatura de evasión. Desde su aparición, primero en la narrativa popular (1911), y poco después en el cine (1918) –en España algo más tarde--, su nombre sólo fue comparable durante varias generaciones de jovencitos con el del gran creador; tan sólo Dios parecía atesorar más poder que el apolíneo rey de la selva. Su imagen fue agrandándose a ritmo de vértigo, hasta llegar a ser idolatrada como la más carismática de cuantos símbolos de libertad y liberación proyectara la figura humana. Ni siquiera ya mayorcitos, cuando todos sus fans descubríamos la evidencia de su inexistencia, perdió un ápice de virtuosismo y admiración. El crédito de Tarzan se mostró imperecedero a lo largo de muchas décadas, y aún sigue siéndolo. Por eso, en la parcela coleccionista, los carteles y programas de mano correspondientes a su filmografía constituyen hoy una fuente de pasión casi incomparable. A continuación mostramos algunos de esos ejemplos visuales de su paso comercial por España del periodo 1920-1950.

Anuncio publicado en la revista Arte y Cinematografía en octubre de 1929,
donde se compara las aventuras del héroe con las narraciones de Julio Verne. 
Ni asomo de de su creador, Edgard Rice Barrougth




TARZAN DE LOS MONOS
Tarzan of apes. USA 1918-1920
Cartel de J. García




 LAS NUEVAS AVENTURAS DE TARZAN
The new adventures of Tarzan. USA 1935
Programa de mano ilustrado por Edi 





 TARZAN EN LA CIUDAD MUERTA
The new adventures of Tarzan. USA 1935

Cartel



 TARZAN EN LA CIUDAD MUERTA
The new adventures of Tarzan. USA 1935

Cartel de Moscardó




Tebeo almanaque para 1935 de la Colección Pitusa
Editorial Alas





TARZAN Y LA DIOSA
Tarzan and the green goddess. USA 1938
Cartel 





TARZAN Y SU HIJO
Tarzan finds a son. USA 1939
Cartel de Piñana





 EL TESORO DE TARZAN
Tarzan's secret treasure. USA 1941
Cartel de José María





TARZAN EN NUEVA YORK
Tarzan's New York adventure. USA 1942
Cartel de Jose María





TARZAN EL TEMERARIO
Tarzan's desert mystery. USA 1943
Cartel 





TARZAN Y LA FUENTE MÁGICA
Tarzan's magic fountain. USA 1949
Cartel de Jo-an





jueves, 5 de enero de 2012

EL PIRATA NEGRO, 1926


La historia del pirata escondido

Hacia mediados de los años noventa andaba yo dándole vueltas a la posibilidad de editar un libro sobre los carteles de cine creados o distribuidos en España. El panorama informativo y documental era el principal freno. Las dificultades de localización de carteles representativos, de autores, de décadas concretas era poco menos que imposible. Tan sólo el paso de los años y la ayuda inestimable de la Filmoteca Valenciana, así como la algún amigo coleccionista, junto al material que yo había ido acumulando en los últimos años, hizo posible el milagro de ver el libro publicado.

Fue una travesía compleja, extremadamente difícil, ya que a la dificultad de localización de material gráfico representativo se unía la oscuridad informativa: nunca antes nadie había escrito ni siquiera un artículo o ensayo sobre el asunto. Pero, poco a poco, cartel a cartel, dato a dato, fui elaborando un modesto discurso que aportaba cierta luz al origen del medio, a su evolución gráfica, a sus valores y características visuales, a la personalidad de sus principales creadores, a los géneros, etc.

Con todo, el mayor freno lo representó la etapa del cine mudo: ni rastro de carteles de esa época, salvo los mencionados de la Filmoteca que pertenecían en su mayoría al cine español. Yo ansiaba localizar alguno correspondiente al Hollywood más rutilante, entre otras cosas porque los carteles del cine mudo utilizados en España correspondientes a producciones foráneas solían ser los mismos que se utilizaban en los países de origen. Aquí en nuestro país se castellanizaban superponiendo una franja sobre el título original, y asunto concluido. Me interesaba algún cartel USA de Garbo, Chaplin, Valentino, Fairbanks, etc, especialmente por la comparativa que hubiera permitido llevar a cabo con el cartel autóctono. Y aunque algo pude encontrar, no logré sin embargo ninguno de cierta relevancia, y menos aún que correspondiera a los años veinte. 

Recién publicado mi libro, hurgaba un día en casa el interior de una caja que contenía documentos cinematográficos y reparé en un libro, forrado con un papel de época, que había comprado en una librería de libro antiguo bastantes años atrás; un libro que en el pasado había consultado con frecuencia, pues correspondía a un anuario de la revista Arte y Cinematografía. Al sacarlo de la caja observé que el papel del forro se desprendía de uno de sus lados, dejando al descubierto una litografía colorista que llamó mi atención.

¡Oh! Sorpresa !Parece un cartel! Y en efecto, se trataba del cartel original de El Pirata Negro (The Black Pirate), la película de Douglas Fairbanks producida en 1926, aunque, eso sí, mutilado para tal efecto. Alguien en aquellos años debió pensar que era el envoltorio ideal para proteger las tapas de tan relevante anuario, sin sospechar que estaba lapidando varios miles de dólares de hoy en día (acabo de comprobar su valor en una subasta celebrada recientemente en Estados Unidos)

Conservo ese cartel, o lo que queda de él, como una pieza entrañable de mi colección, aunque su valor sea mínimo o ninguno. Pero me queda la duda de si se trata del modelo americano o del español adaptado e impreso en nuestro país (observen que apenas hay rastro tipográfico) En todo caso, de haberlo descubierto a tiempo, hoy figuraría en un lugar destacado de ese libro al que tanto esfuerzo dediqué.  

Lo que encontré al desplegar el papel que servía de tapas 
al tomo del anuario de Arte y Cinematografía



Cartel USA subastado recientemente

domingo, 1 de enero de 2012

MARILYN. NI CONTIGO NI SIN TI


50 años de tu adiós.
5 de agosto de 1962

Ni contigo –porque estás pero no estás--, ni sin ti --porque no estás pero estás--. tienen los males del cine remedio. Antes era la gran pantalla la nodriza que acunaba tu devenir, la que mostraba todo tu talento, ese torrente carnal que encendía las plateas. Un huracán de aire fresco antes nunca visto sobre el gran lienzo de una sala oscura. Y el caso es que estás ahí, igual o más presente que en los días de tus estrenos, con los plasmas de medio mundo mostrándote una y mil veces. Sin embargo, para millones de cinéfilos no es lo mismo la ausencia de luto que tener el alma enlutada.  No es lo mismo saber que existes a la orfandad verdadera, la de carne –¡y qué carne!— y hueso, la que nos priva desde hace 50 años de tu sonrisa carmín, de tu voz ingenua, de tu cuerpo de carretera peligrosa, de tu pelo prendido al delirio. Ya todo son figuraciones de otro tiempo, como sucede con todo el cine clásico en general, por otra parte. Pero esa inquebrantable verdad, en tu caso, no sirve de consuelo. Las actrices y actores pasan, y les suceden otras actrices y actores. Pero a ti… ¿Quién te sucede a ti?  Y no será por que Hollywood no lo haya intentado, incluso mucho antes de tu adiós. En mi caso me consuela los fetiches con tu imagen que atesoro: fotos, programas de mano, revistas, cromos… Pero por encima de todo los carteles, aquellos que idearon aquí en España ilustradores como Soligó, Jano, MCP y Mac, principalmente. No todos tan afortunados en la composición como tu merecías, pero honestos al fin y al cabo. Quizás sea poco consuelo, sí, pero al menos puedo verte cuando me da la gana. Un ritual que repetiré con más frenesí que nunca este año de 2012 en el que se cumplen 50 años de tu sorprendente e insoportable adiós.   

 AMOR EN CONSERVA
Love harppy. USA 1949
Diseño: Jano



 LA JUNGLA DE ASFALTO
The asphalt jungle. USA 1950
Diseño: José María



 EVA AL DESNUDO
All about Eve. USA 1950
Diseño: Soligó



 NIEBLA EN EL ALMA
Dont bother to knock. USA 1952
Diseño: Jano



 NO ESTAMOS CASADOS
Were not married. USA 1952
Diseño: Soligó



CUATRO PÁGINAS DE LA VIDA
O. Henry's full house. USA 1952
Diseño: Soligó




 ME SIENTO REJUVENECER
Monkey Business. USA 1952
Diseño: Soligó



NIAGARA
USA 1953
Diseño: Soligó





 LOS CABALLEROS LAS PREFIEREN RUBIAS
Gentlemen prefer blondes. USA 1953
Diseño: Dos



  LOS CABALLEROS LAS PREFIEREN RUBIAS
Gentlemen prefer blondes. USA 1953
Diseño: Dos



  CÓMO CASARSE CON UN MILLONARIO
How to marry a millonaire. USA 1953
Diseño: Soligó



  RÍO SIN RETORNO
River of no return. USA 1954
Diseño: Soligó



  LUCES DE CANDILEJAS
There's no business like show business. USA 1954
Diseño: Jano



  LA TENTACIÓN VIVE ARRIBA
The seven year itch. USA 1955
Diseño: Mac



  BUS STOP
 USA 1956
Diseño: Jano



 EL PRÍNCIPE Y LA CORISTA
The prince and the showgirl. Reino Unido 1957
Diseño:





EL PRÍNCIPE Y LA CORISTA
The prince and the showgirl. Reino Unido 1957
Diseño: MCP (Cartel reposición c. 1970)






CON FALDAS Y A LO LOCO
Some like it hot. USA 1959
Diseño: Mac






EL MULTIMILLONARIO
Let's make love. USA 1960
Diseño: Soligó






VIDAS REBELDES
Vidas rebeldes. USA 1961
Diseño: Mac